Hace un mes, José Sulantay dejó de forma definitiva la pizarra, luego de una magra campaña con su querido Coquimbo Unido. El “Negro”, a sus 70 años, dio un paso a un costado después de más de cinco décadas ligado al balompié profesional, primero como jugador y luego como técnico. Pero esa experiencia la seguirá traspasando en el puerto, en una escuela de fútbol que lleva su nombre. Qué mejor marca para quien tiene como máximo logro haber comandado a la Selección Chilena Sub 20 que fue tercera en el Mundial de Canadá 2007.
Y si bien ese logro a veces eclipsa su extensa carrera, Sulantay cuenta detalles inéditos de su vida dentro y al borde de la cancha, como que nunca estuvo en divisiones inferiores y que de pequeño practicó atletismo: garrocha y mediofondo. El fútbol rentado recién llegó a la Región de Coquimbo en 1956, con Deportes La Serena, elenco en el cual dos temporadas más tarde, y con 18 años, tuvo su estreno. “Un compañero del colegio me llevó a dar una prueba y al otro día empecé a entrenar, aunque no pude debutar ese año porque el torneo estaba en marcha”, recuerda el ex ariete que en Chile jugó en O’Higgins, Palestino, Antofagasta y Coquimbo. Sus buenas actuaciones con los “papayeros” lo llevaron a ser considerado por el recién fallecido DT Fernando Riera para la Roja que se preparaba para el Mundial de 1962. Pero el anhelo de ser parte de la convocatoria se empezó a esfumar con el descenso a segunda de los granates en 1959. “Para los de provincia era difícil llegar a la selección, y más aún si estabas en el ascenso. Eso me condicionó”, cuenta.
-¿Su peor momento como futbolista?
-Perder la categoría con La Serena. Teníamos un gran equipo, pero terminamos bajando siendo octavos en un torneo con porcentajes que nunca entendí.
-¿Y su mejor campaña?
-Recuerdo bastante la de 1964, cuando disputé el título de goleador con Carlos Campos.
-¿Cómo eran los jugadores de esa época?
-Bastante pícaros y pelusones, pero el ambiente era excepcional. Se armaban grandes amistades, porque no había mayor entretención y andábamos juntos para todos lados. Una vez estábamos conversando un grupo en el Hotel Ritz de Santiago y de repente nos cayó encima un colchón, lo que nos asustó. Fue “Pancho” Fernández el gracioso que lo tiró.
-¿Cuál fue el mejor jugador que enfrentó?
-Hay varios, como Raúl Sánchez y Elías Figueroa. A Elías lo enfrenté en su segundo partido como profesional, y era extraordinario. También destaco a Leonel Sánchez y al “Chita” Cruz, en verdad son muchos.
Sulantay colgó los zapatos en 1973, tras estar varios años en Centroamérica, en El Salvador (en Universidad de El Salvador y Atlético Marte) y Guatemala (en Atlético Cobán y Aurora). Se dedicó a otros rubros hasta que Gustavo Camelio, ex presidente de Coquimbo, le pidió que entregara su sapiencia a los niños. “Nunca pensé en ser técnico. Yo tenía un criadero de aves y trabajé en varias cosas. Incluso puse una empresa de transportes. Pero cuando volví a Chile, sin curso, el “Cua Cua” Hormazábal me pidió como ayudante”, recuerda quien fue DT campeón con Cobreloa en 1992.
-¿Alguna vez estuvo cerca de llegar a alguno de los “grandes”?
-De Colo Colo, pero no me gustó la forma en que me contactaron, justo antes de un partido ante ellos, estando yo en Cobreloa en 1993 y con el título en disputa. También tuve alguna conversación informal con René Orozco para ir a la “U”, pero nada más.
-¿Qué fue lo mejor como estratega?
-Siempre me he propuesto objetivos, y uno era tomar la Sub 20. En eso fue súper importante Juvenal Olmos, él me propuso y me respaldó ante los dirigentes.
-¿Y el momento más triste?
-Las veces que me tocó descender. Me caí con Rangers, y a pesar de eso la gente hasta hoy me estima. Con La Serena también, porque pese a que soy de Coquimbo, para mí es un club muy importante y sus hinchas siempre han tenido respeto hacia mí.
-¿Por qué la gente lo quiere tanto? Eso es inusual en un DT...
-No lo sé. Y sin soberbia, yo no sé si hay otro técnico que reciba tanto cariño. Soy feliz con que la gente me estime.
-¿Cuáles fueron los jugadores más complicados que dirigió?
-Siempre los hay, pero deben ser aprovechados. Los casos de (Gary) Medel y de (Arturo) Vidal parecen conflictivos, pero a mí me gusta tener ese tipo de jugadores. El “Fantasma” Figueroa también tenía una personalidad fuerte, pero era un excelente futbolista y ahora como técnico va en el camino correcto. Lo mismo digo de Ivo Basay.
-¿Tuvo líderes en sus equipos?
-Yo siempre traté de que ninguno marcara la forma de juego ni la disciplina. Siempre les decía que el líder era yo. Un técnico que no es el líder, no sirve.
fuente Rev. triunfo
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